Se terminaron las elecciones europeas y municipales, pero ahí siguen los problemas intactos para el pueblo.

1831 ayuntamientos en España, con muchísimas siglas distintas de por medio, son muchos ayuntamientos para llegar a acuerdos y poder formar mayorías a gusto de unos y de otros, en Madrid, desde donde se dirige todo, y desde las diferentes comunidades autónomas.

Y los ciudadanos de a pie esperando a ver qué acuerdos serán los buenos para nuestros intereses, y cuáles los mejores, porque yo quiero pensar que malos no hay. En cada partido se pensará que sus cálculos postelectorales serán los mejores, pero los que somos pueblo no entendemos todavía que los candidatos que más cantidad de votos sacaron en el recuento no sean alcalde o alcaldesa, y que los que menos votos sacaron puedan tener en sus manos la llave de la gobernabilidad.

No entiendo que se pueda nombrar un regidor en esas condiciones en determinados ayuntamientos. Siempre se dijo que las matemáticas no engañan, que 10 + 10 son 20 y 5 + 5 son 10, esto siempre ha sido así, pero con tanta tecnología eso parece que ha pasado a la historia.                                               

Con esta falta de acuerdos ¿que pasará con la economía, con los presupuestos del ayuntamiento de turno, con tantos retrasos y tanta demora en solucionar los asuntos que de verdad tocan al pueblo, teniendo en cuenta que la municipal es la administración más cercana a la gente?

Si pasan mucho tiempo entre acuerdos y desacuerdos, ¿no se les olvidarán los compromisos adquiridos pregonados en campaña?

En este artículo solo pedimos humildemente que se den prisa antes de que llegue el verano, y no digamos el mes de agosto, que es totalmente vacacional y festivo en todos los pueblos y algunas capitales.

Esperemos que las diputaciones sean más fáciles de gobernar esta vez. Particularmente en nuestra Almería, hay todavía una incógnita por resolver, aún no sabemos quién será el presidente de la diputación de Almería, que debe ser para todos y para todas. Salud y suerte.