Marcos Muñoz Román, director de Seguridad Ciudadana, un cargo de confianza nombrado por el alcalde de El Ejido Francisco Góngora, y con conocidos vínculos familiares en la judicatura, ha dimitido hoy y ha pedido vacaciones después de conocer el veredicto del tribunal examinador, que le ha otorgado una calificación de 3,66, frente a un 2,66 del otro aspirante, Manuel Vidal. En un mensaje de Whatsapp que reproducimos literalmente comunica sus compañeros: ‘Buenos días, hoy he presentado mi dimisión como Director de Protección Ciudadana del Ayuntamiento de El Ejido, en unos días me incorporaré a mi puesto en la Policía Local, el número de teléfono desde el que os escribo dejará de estar a mi disposición en breve, os facilito mi número personal: XXX XXX XXX, gracias y un saludo.’

Tras varios recursos e impugnaciones presentados por parte de los sindicatos policiales y alguno de los aspirantes, como es el caso de Manuel Vidal, de los que hemos dado cuenta en tres artículos publicados días atrás en EL COMERCIO DE ALMERÍA, la plaza de subinspector de la Policía Local de El Ejido ha sido declarada desierta al no otorgar el tribunal suficiente nota a ninguno de los aspirantes.

En los círculos de la Policía Local de El Ejido se especula que esta solución ‘salomónica’ obedece en realidad al temor de algunos de los miembros del tribunal examinador, al no tener la completa seguridad de que esta convocatoria cumple con todos los requisitos de legalidad, y por tanto de que esté excluida del todo la posibilidad de estar cometiendo alguna irregularidad, e incluso un delito de presunta prevaricación, como fue el caso de la prueba del ingeniero de Puertos, Caminos y Canales que El Comercio de Almería publicó el pasado sábado.

Ha trascendido que, Manuel Vidal, uno de los aspirantes a la promoción a subinspector de la Policía Local de El Ejido, cuando ambos aspirantes terminaron el examen solicitó, para evitar, entre otras cosas, las críticas internas que estaba habiendo, y los rumores de ‘tongo’, que ambos aspirantes se firmaran mutuamente los exámenes para dar una seguridad de que lo que se corregía es lo que se había hecho allí, y se llegaron a firmar el uno al otro todas las páginas de la que constaba cada uno de los exámenes, y según declara a esta redacción un miembro de la Policía Local de El Ejido: ‘Claro,  antes esa presión al tribunal, y las advertencias previas que había de que se iba a recurrir a diferentes tribunales, tanto al contencioso-administrativo como al penal, en caso de advertir alguna irregularidad, algunos de los miembros del tribunal han optado por no arriesgarse y no otorgarle a ninguno de los dos la suficiente puntuación y declarar la plaza desierta.’

En otro orden de cosas, aunque sin salirnos del ámbito de las pruebas en la Policía Local, en este caso de las plazas convocadas para la promoción a oficial, se da la circunstancia de que al primer examen de 14 aspirantes solo han concurrido 5, y que ‘han hecho solo el temario, dicen, a medida de uno de los aspirantes’, nos cuenta otro agente de la Policía Local, que añade: ‘y no solo en la policía, todas las plazas que se están otorgando ahora deprisa y corriendo y que no se han convocado en 8 años, se están haciendo con nocturnidad y alevosía…’ Aunque, todo hay que decirlo, los aprobados pasarán en breve a realizar la segunda prueba.

Debido a los recursos y a las dudas puestas de manifiesto con la convocatoria de la plaza única de subinspector, cuando en realidad correspondían dos plazas, y con otros asuntos como el publicado en El Comercio de Almería sobre la plaza de ingeniero de Puertos, Caminos y Canales y otros que nos están llegando al correo de esta redacción, además de las numerosas quejas que recibimos a diario sobre las dudas que generan las diferentes pruebas y oposiciones que se están desarrollando en el ayuntamiento de El Ejido cunde la sensación de que la inseguridad jurídica, tanto de los aspirantes como de los miembros de los diferentes tribunales examinadores, aconsejan que todas y cada una de las pruebas y convocatorias de ascensos y promociones internas, así como las que afectan a la cubrición de plazas vacantes queden en suspenso hasta la incorporación de la nueva corporación que salga de las urnas en mayo.