¡Por España! Así ha concluido la jura de su cargo el verdadero protagonista de hoy en la constitución de la nueva corporación de El Ejido, el eufórico Juan José Bonilla, ante un alcalde ya electo, Francisco Góngora, que no ha sido capaz de sostener su promesa de gobernar en minoría, un jefe de la oposición, José Miguel Alarcón, abatido y cabizbajo, potencial socio preferente para los virtuales acuerdos en minoría ya definitivamente rotos, que apenas ha podido pronunciar cuatro o cinco frases más o menos recurrentes, y un ofrecimiento último para llegar a acuerdos que ya debería comprender que es pólvora mojada, por mucho que asesores y estrategas ajenos a un PSOE se empeñen en venderle lo contrario.El virtual nuevo teniente de alcalde y concejal de Urbanismo, Juan José Bonilla, con otros concejales de Vox que formarán parte del equipo de gobierno

Mejor, sin duda, el discurso más largo y estructurado de Cecilio Vargas, número 1 de Ciudadanos, que ha llamado a la regeneración democrática en el municipio, a la vez que ha recordado al ya alcalde, Paco Góngora, su condición de investigado y procesado, sin olvidar la obligación del ayuntamiento de dar el mismo servicio a los ciudadanos de todos los núcleos, el fomento del tercer sector y la participación de los ciudadanos a través de todo tipo de asociaciones que ayuden a vertebrar el municipio, algo que ha tenido una respuesta inmediata, excesiva para el día del que hablamos, el día de la constitución de la nueva corporación, por parte de Francisco Góngora Cara, nervioso y mal encarado, que se ha permitido incluso hacer un amago de amenaza y señalar sin nombrar a alguno de los miembros del grupo municipal de Ciudadanos a la vez que le recriminaba a Cecilio Vargas haber sostenido otro discurso en la reunión anterior de ambos.

Mejor, sin duda, el discurso más largo y estructurado de Cecilio Vargas, número 1 de Ciudadanos, que ha llamado a la regeneración democrática en el municipio, a la vez que ha recordado al ya alcalde, Paco Góngora, su condición de investigado y procesado.

Los recursos del alcalde, parece que cada vez más limitados, se repiten; sencillamente parece incapaz de tolerar la más mínima crítica. Minutos antes, el propio alcalde recurría un tanto desganadamente a su eterna letanía de economías circulares, proyectos de futuro, mejorías sobre el papel, mentiras piadosas, etc., sin aportar nada verdaderamente ilusionante para el municipio y sin mencionar los gravísimos problemas que aquejan a El Ejido, por no mencionar algo que el propio Paco Góngora señaló en su día, que es el especial seguimiento de los acontecimientos locales que la inclusión de Vox en el gobierno municipal va a acarrear.